Mi cambio de look en Michel Meyer
Las que me seguís con frecuencia a través del blog sabréis que hace varios meses decidí cambiar mi color de pelo y pasar del rubio al pelirrojo, un color muy trendy y del que estaba enamorada. Pero con el paso de las semanas mi pelo ha ido creciendo y la raya de la raíz también, por lo que al ser la base de mi tono natural mucho más oscuro quedaba muy feo y antiestético. Ya no podía hacerme una coleta, ni llevar el cabello liso porque se notaba muchísimo. Así que me planteé de una vez por todas volver a mi tono de pelo natural, un castaño claro.
Si habéis pasado por esta experiencia sabéis que el periodo de recuperación del tono natural del pelo es largo y costoso. Dependiendo del colorista con el que des decidirá hacerte una u otra cosa, por ello yo no me fiaba de cualquiera y más aún, después de una muy mala experiencia anterior. Tras mucho meditar decidí acudir a Michel Meyer, una peluquería de la que tenía muy buenas referencias.

Beauty Planet Michel Meyer

1 de 13
Con Michel Meyer antes de comenzar mi cambio de look | Michel Meyer
Mi cambio de look paso a paso
Pero… ¿cómo me aplicó José el tinte? Yo diría que la técnica era como la de dar las mechas californianas pero a la inversa, es decir, coloreó mi cabello de manera gradual desde la raya del tinte hasta la zona próxima a las puntas, manteniendo intacta la raíz y el rubio de las puntas.
Mientras esperaba a que subiera el tinte estuve contemplando algunos de los diseños en accesorios para el pelo que elabora Michel Meyer artesanalmente: tocados, sombreros, diademas… que expone en una estantería en su peluquería. ¡Quería llevármelos todos! Pero lo que yo pude ver fue solo una pequeña parte de la colección que expone en su espacio Meyer Estudio, una tienda en donde los sombreros y los tocados son los protagonistas.
Una vez que el tinte había subido pasé a la zona de lavado en donde José matizó mi cabello aportándole reflejos en los mechones más próximos a mi rostro para darle un toque de luz.
El último paso fue retocar un poco las puntas y peinar mi cabello hacia un lado con grandes ondas.
El resultado fue espectacular. Nunca pensé que pudiera un colorista hacer un trabajo tan bueno: devolver a mi pelo su color original y que el resultado fuera tan natural. Me fui de allí con una gran sonrisa, encantada con mi nuevo pelo y deseando de volver muy pronto porque me hicieron sentir como en casa. ¿Cuál será ahora mi nueva excusa?
Fuente: Mª Ángeles Cámara Fuentes 11/03/2013